Dejamos atrás un año en que una vez más Twitter ha sido un campo de batalla por la mente de los venezolanos, por posicionar campañas de desinformación, en donde se propagan noticias falsas, medias verdades y se buscan reacciones de sectores políticos para impulsar la agenda propia. Pero no sólo fue eso. También hubo espacio para la denuncia y hasta para el humor.
Todos los días hay decenas de tendencias en la red social del pajarito azul. Muchas de ellas impuestas por campañas de información coordinadas y promovidas por el Ministerio de Comunicación e Información y otros agentes gubernamentales.
En 2021 empezamos el año en enero con un concesionario de la marca Ferrari. Un politólogo y consultor político disparó un tuit en el que asomaba, con varias imágenes que un concesionario Ferrari habría abierto en Caracas. Fue retomado por cuentas de información, medios y algunos líderes de opinión. Lo cierto es que los automóviles Ferrari tienen 20 años en el país.
El 23 de enero fue también una tendencia pero no impulsada por sectores opositores para reivindicar la democracia, sino para reivindicarlo como una “rebelión popular” y “cívico militar”. Toda una voltereta ideológica para una corriente política como el chavismo cuyo líder fundamental alabó en sus inicios la figura del dictador Marcos Pérez Jímenez.
Febrero fue el mes de la dolorosa tendencia #GarzónViolador. Una joven venezolana había sido violada en Buenos Aires en medio de una entrevista para un empleo. La indignación no tuvo fronteras, ni signo político. Venezolanos visibilizaron la tendencia en varios países, quienes trabajan en servicios de entregas en la capital Argentina hicieron presencia frente al lugar y feministas argentinas hicieron el caso suyo también. El caso fue una muestra sobre cómo la indignación de las redes puede aterrizar en la calle.
Ese mismo mes también fueron tendencia el político Jorge Rodríguez y el cantante Asier Cazalis por una fiesta en la que supuestamente la banda musical venezolana Caramelos de Cianuro habría participado. La tendencia fue orgánica y tuvo su dosis de humor incorporada. Y aunque febrero es un mes corto también resaltó ese mes #Sputnikparalavida que sería retomada varias veces al año, aunque la promesa de las 10 millones de dosis de la vacuna rusa no se terminara de concretar.
Empezando marzo nos quedó la duda de que si el tema que convirtió a Farmatodo en tendencia fue parte de una campaña para presionar a la empresa expendedora de medicinas para que diera vuelto en dólares, como se había comprometido con el gobierno o fue espontánea. En su momento el grafo de Hoaxy indicó que la tendencia era orgánica, pero la coincidencia con declaraciones y compromisos entre el gobierno y la empresa justo poco antes de la viralización llamó la atención. En marzo también fueron tendencia imágenes creadas por la aplicación My heritage que permitió animar imágenes de personas fallecidas que te miraban de manera inquietante.
El 26 de abril la organización Record Guinness hizo publicó oficialmente que Yulimar Rojas había roto el record de salto triple más lejano en interior femenino con 15,43 metros. La atleta fue tendencia, aunque fuertemente impulsada por una campaña coordinada de promoción de la etiqueta por parte del gobierno venezolanos con sus cuentas bots y ciborgs.
También fue en abril, cuando las organizaciones no gubernamentales venezolanas clamaron #SalvemosALasONG para protestar por una resolución que buscaba hacer obligatorio un registro adicional de las organizaciones (y de sus beneficiarios) en una oficina que combate el terrorismo por lo que se consideró que era otra forma de criminalizar el trabajo solidario de las organizaciones no gubernamentales.
#JusticiaparaVanessa logró posicionarse el lunes 12 de abril, colándose en medio de las campañas gubernamentales que por esas fechas se incrementan y acaparan la atención debido a las conmemoraciones y celebraciones de los hechos ocurridos el 11,12 y 13 de abril de 2002. La tendencia fue un reclamo por la detención de la activista Vanesa Rosales una activista merideña, educadora y defensora de los derechos de la mujer. Fue tendencia para exigir su libertad plena y para recordarnos que en Venezuela las mujeres no tienen derecho integral de su propio cuerpo.
En mayo destacamos la campaña #ElbeatoDelPueblo para referirse a José Gregorio Hernández. Una campaña tan impulsada por el gobierno que fue más visible en las tendencias que la impulsada por la iglesia católica. Pero eso sí, tuvo poco de orgánica. El grafo de Hoaxy destaca claramente por su color anaranjado y rojo lo que indica a cuentas que promueven una campaña sincronizada.
También en el quinto mes del año fue tendencia #VacunasParaElPueblo. Lo que a primera vista pudiera ser un reclamo, no era sino una campaña gubernamental. Una campaña que ocultaba que no habían llegado suficientes vacunas, que de las diez millones de vacunas rusas sólo habían llegado a cuenta gotas, que las chinas empezaban a llegar y que para ese mes todavía no se terminaba de definir el acuerdo COVAX con la Organización Panamericana de la salud. Por supuesto era una campaña de propaganda coordinada de esas que empiezan con la etiqueta del día promovida por el MInisterio del Poder Popular para la comunicación e información.
Y finalmente en el mes de mayo imágenes de la represión en Venezuela de 2019 fueron usadas para atacar a Iván Duque, el presidente colombiano, por parte de un grupo político afín al peruano Pedro Castillo y a Nicolás Maduro en Venezuela. Duque reprimió duramente las manifestaciones en Colombia, no le hacían falta imágenes prestadas.
El chavismo dividió al país entre patriotas y apátridas, por eso es posible que una etiqueta como #VenezuelaPatriota sea impulsada por el gobierno nacional sin más razón que ocupar una tendencia destacada en Twitter pues es usada en todo tipo de tuits gubernamentales, sin una temática común. El resultado es que estas tendencias artificiales solo sirven para ocultar otros temas y fortalecer una visión polarizada del país. Esto ocurría una vez más, cuando ya mediaba el año.
Fue también en junio cuando se concretó un anunciado cambio de nombre de la autopista Francisco Fajardo a Cacique Guaicaipuro. La tendencia fundamentalmente orgánica vino acompañada de una imagen en la que se veía tanto el nuevo como el viejo rótulo e hizo que muchos recordaran otros cambios que han constituido en los gobierno de Chávez y Maduro lo que llamamos la revolución nominal.
Cuando los defensores de derechos humanos de la organización no gubernamental Fundaredes fueron detenidos de manera arbitraria a principios del mes de julio dos tendencias lograron posicionarse entre las más destacadas: LiberenActivistasDeFundaRedes y #LiberenALos3DeFundaRedes. Defender los derechos humanos no debería ser un riesgo. Informar con regularidad sobre lo que ocurre en una parte del país tampoco. A finales del año 2021 sólo Javier Tarazona continúa detenido, y sus otros dos compañeros en régimen de presentación.
Del 11 al 17 de julio ocurrieron las más importantes protestas en Cuba desde el período especial en 1994. Las protestas fueron fuertemente reprimidas y en internet contaron con la complicidad de toda la estrategia de propaganda en redes del gobierno venezolano y por supuesto con todas las cuentas de Twitter de la red Barrio Adentro y Cuba Coopera. La campaña se expresó con la etiqueta #VenezuelaConCuba. Por supuesto en esta campaña destacan las cuentas bots y ciborgs por lo que podemos decir que cuando se trata de la relación Cuba-Venezuela, la solidaridad es automática y automatizada.
En agosto lo más destacado de 2021 fue la campaña del PSUV para sus elecciones primarias. La etiqueta #EpaPSUV2021 fue tendencia relevante durante toda la semana entre el 1 y el 8 de agosto. Pero no fue un debate entre militantes del PSUV sino una campaña coordinada más, que por supuesto también usó cuentas gubernamentales, transgrediendo la línea que debería separar partido de Estado. Como el 29 de agosto era la fecha límite de inscripción también hubo campaña en twitter con la etiqueta #21NVictoriaChavista.
En septiembre el #BancodeVenezuela se convirtió en tendencia por un pésimo servicio durante el cual la plataforma del banco estuvo caída durante al menos cinco días. Lo que según expertos fue una falla técnica por falta de mantenimiento, para el gobierno fue un acto terrorista.
Raúl Isaías Baduel se convirtió en el mes de octubre en el décimo preso político en fallecer en custodia del Estado.Y por supuesto se convirtó en tendencia en una mezcla de manera orgánica en una mezcla de mensajes luctuosos, irónicos, informativos o indignados.
La extradición del empresario colombiano Alex Saab, que se ha beneficiado con numerosos negocios con el gobierno fue también tendencia en octubre, junto con el periodista Roberto Deniz que ha contado la historia y la relevancia de Saab, mucho antes de que fuera reconocida por el empresario y por el gobierno.
Y en una nota fuera de la política, aunque por supuesto terminó politizada, fue tendencia la actriz Alba Roversi por trabajar como repartidora en Las Vegas. La tendencia fue claramente impulsada de manera orgánica aunque con el apoyo de varios medios entre ellos el canal Telemundo que realizó el reportaje que se viralizó. También en noviembre causó indignación el bono de 14 bolivares que dio el gobierno a través de Instituto Venezolano de los seguros sociales a los pensionados. Una tendencia que fue naturalmente orgánica.
La campaña electoral fue también tendencia sobre todo por el enfrentamiento opositor en Miranda. Momento que la maquinaria de propaganda del chavismo se detuvo quizás para hacer más visible la confrontación opositora. Ocariz fue tendencia porque no quería retirarse de la campaña primero y porque finalmente lo hizo después quedando sólo David Uzcategui como candidato opositor. Aunque ya en diciembre la tendencia post electoral fue sin duda Barinas. Un inesperado éxito opositor que dejó perplejo al gobierno a tal punto que se paralizó el conteo,militares secuestraron actas y con la ayuda del Tribunal Supremo de Justicia se ordenó la repetición de las elecciones.
¿Qué miramos, qué pensamos cuando escribimos de desinformación? Te lo recordamos en éste texto que no debes dejar de leer para empezar un 2022 vacunado contra la desinformación.