Desde la llegada de Elon Musk a Twitter como nuevo propietario, se había anunciado qué podía pasar: la eliminación o restricción sustancial de la API pública de Twitter ¿Que es una API? Es como el mesonero de un restaurante, pero de una aplicación. Te permite interactuar con ella, pedirle cosas y que te las traiga. En el caso de Twitter, siempre tuvo la virtud de que era generosa y permitía hacer muchas solicitudes y opciones de publicación. Esto servía para inventar aplicaciones, creando todo un ecosistema alrededor de Twitter y por supuesto permitía investigar de manera amplia los intereses y conversaciones en esa red social que sus fundadores concibieron en primer lugar como una gran plaza pública.
La API de Twitter es también la razón por la que tenemos años viendo muchas investigaciones sobre desinformación que se hacen con Twitter como red social. No es que en Twitter haya más desinformación que en cualquier otro lado, es que hasta ahora, era mucho más abierto para las investigaciones.
Muchas de las investigaciones publicadas en la web del Observatorio Venezolano de Fake News hacen uso de la API pública de Twitter. Cada vez que leíste un análisis de viralización de una tendencia, de una campaña coordinada promovida por el gobierno venezolano, la data extraída, de quién comenta a quién, quién comparte o cuál es el mensaje más retuiteado, estabas en presencia de la API pública de Twitter que ya no se podrá usar más. O que, para ser precisos, es tan limitada que quizás puede ser útil para probar una nueva aplicación de manera puntual, pero insuficiente para estudiar desinformación. Una de las herramientas más usadas por nosotros en el OVFN, Hoaxy, creada por la Universidad de Indiana en Estados Unidos, así como su Botometro, no funcionarán más y es que el cambio es muy drástico. La opción más económica del Twitter de Elon Musk son 100$ por 10 mil tweets al mes, algo así como el 0,3 por ciento de lo que se podía usar con anterioridad. No es asequible, ni útil, ni funcional para la investigación.
¿Se podrá seguir investigando la desinformación en Twitter?
- Poder, se podrá, pero será menos rápido, menos práctico y si Twitter lo quiere hacer difícil, podrá hacerlo. Para seguir investigando habrá que usar la extracción de datos. Para entendernos: antes se le pedía a Twitter una información y ésta te la entregaba. Ahora tienes que entrar a tomarla tú. Pero Twitter siempre puede cambiar la gaveta dónde y cómo guarda las cosas o la manera que las nombra. Así que si tienes una herramienta que las extrae (hay unas cuántas) estas deberán ajustarse a esos cambios. Una y otra vez.
Además, ahora cada investigador deberá organizar su información descargada. Por ejemplo, la herramienta Hoaxy, usaba la API de Twitter y le añadía un campo definido por ellos que exploraba esos datos e identificaba si según los parámetros creados por ellos (eso es lo que suele llamarse algoritmo) estaba más cerca de ser un bot.
La cuenta oficial Twitter Dev anunció el pasado 29 de marzo que las versiones 1 y 2 de la API (es decir las que existen actualmente) pasarían a ser obsoletas durante el mes de abril así que posiblemente en el transcurso del mes verás cómo usos de Twitter que estaban normalizados para ti, cómo guardar un hilo para que te lo recuerde más tarde un bot, descargar la información de una tendencia o la cantidad de veces que una cuenta pública (una cuenta automatizada del clima, tránsito o geológica hace uso de la API de Twitter) se verán afectadas.
Un cambio en el modelo de negocio de Twitter afectará a la plaza pública, en el termómetro en el que se había convertido para algunos sectores sociales en Venezuela y en el mundo. Desde ahora, si está pasando, se cuenta en Twitter, si la API lo permite. La desinformación seguirá presente pero seguramente la veremos analizada mucho menos.